EL GOBIERNO DE LOS MEDIOCRES - por Graciela Rubini.

Abel Posse en su libro 'La santa locura de los argentinos' utiliza la palabra 'xiristocracia' (del griego) para hablar del gobierno de los mediocres, de lo malo. A lo largo y ancho de toda su geografía nuestro país tiene muchos xiristócratas gobernando, provincias, municipios, instituciones de todo tipo; son los que en vez de allanarle sus dificultades, van a obligarlo a pensar en qué mundo vive. Son los burócratas detrás de escritorios o diciendo : atrááááássss!, los de cara de cebolla que pareciera que le están haciendo un favor si lo tratan bien; son los que cajonean su expediente porque 'hoy no tienen ganas', los que piden una remuneración 'extra' para obtenerle algún beneficio, los que alzan verjas, alambrados, mostradores y ventanillas para separar, alejar; son los que van a verlo para que los vote y al otro día no los conoce; y así, la lista sería interminable. Acá cabría hablar de la responsabilidad pública, ¿no? El intrínseco deber que le cabe a todo funcionario público, sea cual fuere su estamento de poder, esto es, desde el pez más gordo, hasta el empleado más invisible, de servir, ni más ni menos que de servir con eficiencia y rapidez al que paga sus sueldos. Y en un estado de derecho como esta Argentina pretende ser, pero no lo es, debería ser sancionado todo aquel que no cumpla primariamente con esta insoslayable obligación.