“PUENTE DE FIERRO”

AGRADECEMOS la participacion de María Graciela González y de Graciela del C. Rubini

COMENTARIO

Hola copoblanos!!!!! acabo de leer el articulo que habla sobre la alocada idea de modificar el puente de fierro y las razones que se esgrimen...
me permito asociar este hecho con la caracteristica inapropiada de nuestra sociedad que busca excluir lo viejo como condicion de progreso
soy docente de la catedra de vejez en la UADER y hago un paralelismo entre las personas ancianas y el viejo puente
las generaciones jovenes y adultas tenemos la obligacion moral y material de velar por quienes nos legaron todo lo que somos y tenemos...no nos dejemos engañar, nuestros abuelos inmigrantes comenzaron un camino que es el que hoy nos toca a nosotros seguir andando
tratemos de hacerlo con la suficiente amplitud de pensamiento y firmeza de caracter ya que es a nosotros a quienes corresponde llevar adelante el desafio
ni todo tiempo pasado fue mejor ni es necesario descartar lo usado por usado
siempre hay soluciones alternativas frente al deseo de retiro forzoso al que se obliga a los viejos y a las cosas viejas
es imprescindible, ademas, conservar el emblema que representa a nuestro pueblo desde hace tantos años
destruirlo (alterarlo es una manera de destruirlo) es pisotear la identidad de un pueblo, y asi como el individuo tiene derechos identitarios que le corresponden y alude a ellos toda vez que lo necesita...asi tb nuestro pueblo tiene estos derechos, y es obligacion de quienes lo amamos velar porque se lo respete...
lo nuevo introduce elementos extraños que a veces favorecen a los individuos y a los pueblos, pero estos cambios que ocasiona no son gratuitos, y muchas veces no tienen vuelta atras porque solo el tiempo es quien otorga la condicion de viejo y es a el a quien debemos apelar cuando nuestra memoria se confunde en caminos que dejan de ser propios

Lic. MARÍA GRACIELA GONZALEZ



NUESTRO PUENTE

Es interesante y sumamente positivo el ejercicio de la memoria, como paso previo a la meditación, al pensamiento retrospectivo que nos lleve a las deducciones, a las conclusiones, a las visiones de lo hecho y actuado.
En otras y más simples palabras, remontémonos en el pasado, hagamos memoria y tengamos cuidado con permitir que nos vulneren nuestra identidad.
Y hablo de vulnerar como daño, como herida, como intento de borrar.

Que nos sacan el puente? Que quieren cambiarlo de lugar? El puente?!!
Sí, el puente... el puente de fierro, ese que tiene más de cien años, que lo pusieron hace mucho tiempo, que hubo una fiesta grande de la que hay algunas fotos que nos mostro Humberto Jacob. El puente que está en postales, en incontables recuerdos de la infancia de generaciones y generaciones. El puente que nos define, que nos nombra, que nos dice quiénes somos. EL PUENTE ES MANSILLA.
Y lo quieren sacar? En aras del progreso, el bienestar y la seguridad de la gente... loable! Ahora, me pregunto... lo permitiremos? He tenido la suerte de haber recorrido el país y se repite en decenas de pueblitos diseminados, (en Nogoyá sin ir muy lejos) la pintura de los viejos y derruidos puentes, al lado, conviviendo pacíficamente, de los nuevos y espectaculares puentes que trajo el progreso. Como una forma de aunar la génesis de la historia de las comunidades y sus paisajes autóctonos con el moderno desarrollo de las ciudades. Hoy por hoy, la ciencia y tecnología casi todo lo pueden, por lo que tampoco cabría algún obstáculo para que no pudiera concretarse el emplazamiento de un nuevo puente, necesario, útil y práctico, al lado del otro, el viejo, el enclenque, EL NUESTRO.

EL devenir de los pueblos y los hitos que los han ido conformando, como su arquitectura, su paisaje, son o deberían ser, tan importantes como el desarrollo, la comodidad y la seguridad que aportan las nuevas generaciones con su bagaje de tecnología y desarrollo.

GRACIELA DEL CARMEN RUBINI